Fiestas de San Valero: Día de la leña

Día de la leña

Cada año, el día 29 de enero, en el municipio turolense de Castelnou se celebra el día de San Valero de una manera muy especial para sus vecinos y vecinas. Por esta razón, los dos últimos fines de semana del mes de enero suelen tener lugar las fiestas patronales de esta localidad en torno a esta festividad. Sin duda, uno de los actos más destacables de esta cita es la gran hoguera, la cual puede llegar a medir unos 15 metros de diámetro y de 8 a 10 metros de altura. Esto, unido a la procesión de panes benditos, constituyen los dos actos centrales de este día para los y las caltelnouvenses.

Foto de la hoguera montada (2011) >> pincha para verla en la galería.

Hoguera de San Valero, fiestas 2011

Tradicionalmente, las fiestas de San Valero se celebraban los días 27, 28 y 29 de enero. Sin embargo, desde el año 2004 estas fechas han ido cambiando, tratando siempre que los días festivos coincidiesen con dos fines de semana consecutivos facilitando la asistencia de los vecinos y vecinas que residen fuera de la localidad. Generalmente, el primer sábado los participantes van a recoger la leña mientras que, el segundo, es el turno de serrar la copa -se corta la parte más alta del pino, de ahí su nombre, y se coloca en la parte superior de la estructura-. El resultado será consumido por el fuego esa misma noche.

Tradicionalmente, el día de la leña era lo que generalmente se conocía como la antevíspera de San Valero, que cada año se celebraba el 27 de enero.

Dadas las dimensiones antes mencionadas, resulta evidente que para poder llevar a cabo esta hoguera es necesario recolectar una gran cantidad de leña y, su recogida, se divide principalmente en tres días. En primer lugar se prepara la superficie de la plaza colocando una capa de tierra y una serie de troncos gruesos que servirán como base de la pira. De hecho, en los últimos tiempos se comenzó a denominar este día como el día de los troncos. La segunda jornada, la cual constituye el acto principal de la celebración, es la que se conoce como el día de la leña, día en el que se suele serrar y cargar leña, principalmente de tamariz, procedente de la limpieza de la ribera del río Martín que baña el municipio de Castelnou.

Finalmente, la jornada concluye una vez toda la leña esta está colocada en la plaza, dejando para el día siguiente el retoque final que consistirá en la coronación de la hoguera. Como explicábamos con anterioridad, en esta ocasión se corta principalmente leña de pino, cortando al menos una copa con la que se coronará esta enorme hoguera, motivo por el cual esta jornada también es conocida como el día de la copa.

En el siguiente vídeo, nuestro vecino José María Lucéa recuerda cómo ha ido evolucionando el día de la leña desde que era joven

Foto de familia del día de la leña 2009. >> pincha para verla en la galería

Foto de familia de la Leña 2009

Otra curiosidad destacable en cuanto al tamaño de la hoguera es que en los últimos años ha ido aumentando principalmente como causa de la incorporación de maquinaria agrícola -a principios de los años 90- y la facilidad a la hora de obtener los troncos que conforman su base. Allá por el año 1993 se producían las últimas talas de chopos junto al río Martín, y se dejaban las zuecas -o tocones- de éstos. Sin embargo, lo que supuso un gran avance a la hora de obtener esta materia prima fue la tala de los chopos de la ribera con motivo de su última limpieza en la que se logró apilar y almacenar grandes cantidades de madera. Como no podía ser de otra forma, en los últimos años también ha cambiado el método a la hora de recoger la madera, pasando del uso de hachas, sierras y carros tirados por caballos al ruidoso estruendo provocado por las motosierras.

Una tradición cautivadora

Algo tendrá el día de la leña para que, generación tras generación, continúe cautivando tantos adeptos. Quizás sea ese carácter de hermandad que protagoniza la jornada, aunque también pueda guardar relación con el reparto de ‘carajillos’ procedentes de una gran olla con buenas dosis de azúcar y coñac. Además, es tradicional beberlos en un envasador o una teja. Con los años también ha ido cambiando el menú. Hoy en día se comen judías de ayuno y carne a la brasa, aunque los más veteranos recuerdan que solía comerse carne a la pastora.

Otra de las peculiaridades del día de la leña es que esta jornada tan solo está dirigida a los hombres del pueblo, mientras que el día de la copa lo protagonizan los y las jóvenes de Castelnou a raíz de una queja que tuvo lugar en el año 1997. En este caso, sí que pueden ir acompañados de los más mayores.

En los últimos años, en gran parte debido a la aparición de los últimos avances tecnológicos, sobre todo de las cámaras digitales, son muchas las fotos y vídeos que existen en torno a esta celebración tan importante para los y las castelnouvenses. Por eso no resulta complicado dar con fotografías y vídeos que den testimonio de este día. En su día, la Asociación Cultural la Valera recopiló una colección de fotografías antiguas en torno a esta cita.

‘La barracha’ y los dulces

Son muchas las generaciones de castelnouvenses que sienten una debilidad especial por el hecho de acudir a esta cita tan especial para nuestros vecinos y vecinas.

Una jornada cargada de emociones que, para muchos de los varones de la localidad, ha constituido uno de los mejores días del año. Este día todos se levantan temprano para acudir a la plaza, concretamente al punto denominado el cobertizo, donde les esperan ‘la barracha’ -una bebida preparada a base de anís y moscatel- y los dulces típicos, instantes antes de salir con tractores y remolques hacia el campo.